EDUCACIÓN FAMILIAR

Introducción

Es importante reconocer la educación en la familia como factor vital para que los hijos no busquen la "solución fácil" a sus problemas emocionales.

Las principales emociones que vive todo ser humano son:

  • Miedo: mejor conocido como angustia, ansiedad.
  • Dolor Emocional: mejor conocido como frustración, desengaño, apatía.
  • Ira: mejor conocido como coraje.
  • Culpa: un peso que paraliza.

"Las soluciones fáciles" no sólo son el alcohol, el tabaco, la droga, los fármacos sino también las actitudes destructivas como son la osadía que nos lleva a correr riesgos innecesarios, bulimia, anorexia, obesidad, relaciones sexuales extramaritales, dinero, depresión, rebeldía, agresividad.

Pero las soluciones comprometidas implican que el "hijo" reciba apoyo de la familia.

A continuación viene una sección de preguntas y respuestas que tienen como fin provocar un cambio de perspectiva para que la labor de ser padres sea más fructífera y menos angustiante.

I El hijo en la familia

1.- ¿Qué es un hijo?
Es alguien a quien quiero, por quien me intereso, me preocupo, me canso, me culpo, por quien trabajo, me desvelo, me esfuerzo, etc. Todo esto es un peso superior a mis fuerzas.

2.-¿Qué es un peso superior a mis fuerzas?
Es un peso que rebasa, es algo con lo que sólo no se puede y se quisiera no sentir.

3.- ¿Por qué ocasiona culpa cuando cansan los hijos?
Porque en ese momento se siente al hijo como un problema y quisiéramos que no fuera así.

4.- ¿Qué se debe hacer para no sentir culpa?
Separar la idea de que el hijo es el problema y asumir que el problema es el peso superior a las fuerzas.

5.- ¿Qué se hace con ese peso superior a nuestras fuerzas?
Se hace lo que está de nuestra parte y el resto se le entrega a Dios.

6.- ¿Qué es "hacer nuestra parte"?
Es revisar las posibilidades que se tienen para resolver la demanda que el hijo solicita. Si estas posibilidades se pueden volver a la hora de ejecutarlos una carga pesada, entonces no se esta haciendo nuestra parte, se esta tratando de tomar el lugar de Dios. A los padres les toca hacer lo posible, a Dios se le deja lo imposible eso es sólo de Él. Ejem: Mi hijo me pide que le compre una computadora, y en ese momento no se puede comparla y nos sentimos presionados a hacerlo, pedimos prestado, con esto nos presionamos a trabajar y a ahorrar más, eso provoca angustia, mal genio, nos sentimos alterados. Le salió caro al hijo su Computadora, porque se vuelca la angustia sobre él.

7.- ¿Qué significa que el resto se le entrega a Dios?
Se le entrega lo imposible a realizar por nosotros, esto es vivir la virtud de la humildad con respecto a la relación con Dios, no con otro ser humano.
Una acto de humildad es aceptar que el resultado (positivo o negativo) es el elegido por Dios, siempre para nuestro beneficio aunque no lo parezca.

8.- ¿Qué es ser humilde con respecto a Dios?
Es vernos en la perspectiva de nuestra fuerza ínfima con la de Dios, de nuestra mínima inteligencia con la de Él y de nuestra incipiente lógica con la de Él.

9.- ¿Se vive la humildad con otro ser humano?
No

10.- ¿No?
Un ser humano puede no ganarse que nosotros vivamos la humildad con él, pero si en él vemos la presencia de Dios, entonces se merece que nosotros vivamos la humildad con él.

11.- ¿Entonces a quién se le vive humildad?
Sólo a Dios, que se le ve en cada ser humano.

12.- ¿Tenemos que ser humildes con el hijo?
Sí.

13.- ¿Cómo es eso?
Para poder recibir el mensaje que Dios nos quiere dar a través de él. Hay que ser humildes para aprender de Dios, en mi hijo.

14.- ¿Pero si mi hijo abusa de mi vulnerabilidad?
El hijo tiene una comprensión natural de los padres. Dios los dotó con la capacidad de comprender que un padre es falible. Padre, ¿no lo recuerdas de ti?.

15.- ¿Qué es ser vulnerable?
Es tener nuestra humanidad a flor de piel, lo falible, lo frágil.

16.- Si voy a mostrar vulnerabilidad ¿Cómo voy a ser fuerte para mi hijo?
En la fortaleza que él percibe cuando yo acepto mi falibilidad.

17.- ¿El hijo se da cuenta del miedo que vive un padre?
Si y se rebela a cargarlo, porque no sólo se da cuenta que lo tiene el padre, sino siente como el padre se lo quiere endosar, como un cheque de miedo.

18.- ¿Qué puedo hacer para que mi hijo no sienta mis miedos?
Primero asumir que se tienen y después confiar en la paternidad de Dios para mi hijo.

19.- ¿Qué es asumirlos?
Es una franca comunicación consigo mismo, verlos, darles un nombre "de miedo a...". Después buscarle motivo en nuestra frágil humanidad y por último acogerlos, no pelearnos contra ellos, "esto es lo que somos".

20.- ¿Qué es confiar en Dios?
Existe una gran diferencia entre creer en Dios y confiar en Él. Creer es admitir que existe y confiar es entregarle nuestra voluntad y nuestra vida.

21.- ¿Qué fin tiene la familia?
El fin de la familia no es estar juntos, la unidad no es el fin último de la familia. El cuidar la unidad es un medio para lograr el objetivo, que es el desarrollo y el progreso individual de cada uno de los miembros que la conforman.